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sábado, enero 11, 2025

PLANO CHAKRA ANALÓGICO 6.0 (TERCER OJO) SÁBADO: SANACIÓN DE LA HERIDA DE INTUICIÓN APAGADA

 




Aquí tienes un relato ambientado en la Carrera de la Virgen de Granada, donde ocho personas-chakras se reúnen para intercambiar sus energías y sanar sus heridas emocionales en un sábado con disposición especial para la energía del chakra Tercer Ojo y la herida de intuición apagada:
En la vibrante Carrera de la Virgen de Granada, la energía se sentía especial esa tarde de sábado. Este lugar, conocido por su belleza y su historia, se convertía en el escenario de un encuentro transformador entre ocho personas-chakras.
Roberto, con su energía de liderazgo, llevaba un token-chakra rojo intenso, símbolo de la fuerza y la determinación. Álvaro, con su espíritu de esperanza y renovación, sostenía un token-chakra amarillo brillante, representando la alegría y la vitalidad. Lola, con su sabiduría serena, tenía un token-chakra azul celeste, emblema de la paz y la comunicación. Sonia, con su creatividad desbordante, portaba un token-chakra naranja, símbolo de la inspiración y la pasión. Leo, con su energía de equilibrio, llevaba un token-chakra índigo, representando la intuición y la percepción. Cristian, con su corazón lleno de amor, tenía un token verde, símbolo de la compasión y la sanación. Diego, con su intuición profunda, sostenía un token violeta, emblema de la sabiduría y la percepción. Candela, con su energía de transformación, llevaba un token-chakra blanco, símbolo de la pureza y la renovación.
Se encontraron en el centro de la Carrera de la Virgen, donde la majestuosa Basílica de la Virgen de las Angustias se alzaba como testigo de su reunión. Roberto habló primero, su voz llena de convicción: “He sentido la necesidad de un liderazgo fuerte y justo en nuestro mundo. Es hora de actuar.”
Álvaro asintió, sus ojos brillando con optimismo. “Y yo he visto cómo la esperanza se desvanece en muchos corazones. Necesitamos revitalizar esa chispa.”
Lola, con una sonrisa tranquila, extendió su token-chakra azul celeste. “La paz y la comunicación son esenciales. Juntos, podemos construir puentes y sanar divisiones.”
Sonia, con una chispa de creatividad en sus ojos, añadió: “La inspiración y la pasión son el motor del cambio. Debemos encender esa llama.”
Leo, con su presencia equilibrada, concluyó: “La intuición y la percepción nos guiarán. Debemos confiar en nuestra sabiduría interior.”
Cristian, con una mirada cálida, añadió: “El amor y la compasión son la clave para sanar nuestras heridas.”
Diego, con una mirada profunda, concluyó: “La sabiduría y la percepción son necesarias para guiar nuestro camino.”
Candela, con una sonrisa serena, añadió: “La pureza y la renovación son esenciales para nuestra transformación.”
Intercambio de Energía Chakral
Con un gesto sincronizado, intercambiaron sus tokens-chakra. La energía chakral fluyó entre ellos, creando un arco iris de luz que envolvió la Carrera de la Virgen. Sentían cómo sus propias energías se fortalecían y se equilibraban, transformando sus heridas y máscaras analógicas en digitales.
Roberto, con su token-chakra rojo, intercambió energía con Álvaro, cuyo token-chakra amarillo complementaba su chakra raíz con el chakra plexo solar. Este intercambio permitió a Roberto modular su máscara de intuición apagada, transformándola en una virtud de liderazgo fuerte y justo. Álvaro, a su vez, sintió cómo su vitalidad se reavivaba, permitiéndole inspirar a otros.
Lola, con su token-chakra azul celeste, intercambió energía con Sonia, complementando su chakra de la garganta con el chakra sacro. Este intercambio ayudó a Lola a modular su máscara de incomprensión, transformándola en una virtud de comunicación clara y efectiva. Sonia sintió una nueva claridad en su misión de inspiración y pasión.
Leo, con su token-chakra índigo, intercambió energía con Cristian, complementando su chakra del tercer ojo con el chakra del corazón. Este intercambio permitió a Leo modular su máscara de duda, transformándola en una virtud de intuición y percepción. Cristian sintió cómo su corazón se llenaba de amor y sanación.
Diego, con su token-chakra violeta, intercambió energía con Candela, complementando su chakra corona con el chakra raíz. Este intercambio permitió a Diego modular su máscara de intuición apagada, transformándola en una virtud de sabiduría y percepción. Candela sintió una nueva claridad en su misión de transformación y renovación.
Sanación de Heridas Propias
Además del intercambio de energía chakral, cada uno de ellos utilizó la energía de su propio chakra para sanar sus heridas emocionales. Roberto, con su token-chakra rojo, se centró en su chakra raíz, sanando las heridas de intuición apagada y fortaleciendo su coraje. Álvaro, con su token amarillo, se enfocó en su chakra plexo solar, sanando las heridas de falta de vitalidad y fortaleciendo su alegría. Lola, con su token-chakra azul celeste, se concentró en su chakra de la garganta, sanando las heridas de incomprensión y fortaleciendo su capacidad de comunicación. Sonia, con su token naranja, se centró en su chakra sacro, sanando las heridas de falta de inspiración y fortaleciendo su creatividad. Leo, con su token-chakra índigo, se enfocó en su chakra del tercer ojo, sanando las heridas de duda y fortaleciendo su intuición. Cristian, con su token-chakra verde, se centró en su chakra del corazón, sanando las heridas de desconfianza y fortaleciendo su capacidad de amar y compadecer. Diego, con su token-chakra violeta, se concentró en su chakra corona, sanando las heridas de intuición apagada y fortaleciendo su sabiduría. Candela, con su token-chakra blanco, se centró en su chakra raíz, sanando las heridas de transformación y fortaleciendo su pureza.
La Carrera de la Virgen se llenó de una energía vibrante, y los ocho amigos supieron que habían dado un paso importante hacia un mundo más equilibrado y consciente. Con sus energías chakrales alineadas, estaban listos para enfrentar cualquier desafío y continuar su camino de sanación. La catarsis poética que crearon resonó en el aire, donde los denotadores "fácticos" ligados a las heridas emocionales del pasado se entrelazaban con los connotadores "poéticos" de las máscaras del futuro, y los oximorones del presente (Kemón) se transformaban en virtudes sanadoras.
Conexión entre Usuarios Panópticos Ubicados en la Carrera de la Virgen
Preparación Cuántica del Fractal:
Encuentra un lugar tranquilo y cómodo.
Cierra los ojos y toma tres respiraciones profundas, inhalando por la nariz y exhalando por la boca.
Visualiza tu cuerpo como un campo de energía cuántica, donde cada partícula vibra en armonía.
Conexión Cuántica:
Imagina una luz índigo brillante que emana desde la zona de tu tercer ojo, justo en el centro de tu frente.
Siente cómo esta luz envuelve tu tercer ojo, llenándolo de poder personal y confianza, y cómo cada partícula de tu ser (QUANTUM SENSORIAL) resuena con esta energía.
Intención Cuántica:
Repite en tu mente: “Estoy abierto a la intuición y la percepción. Mi tercer ojo está en armonía con el universo cuántico.”
Visualiza cómo esta intención se propaga a través de las partículas cuánticas, creando un campo de energía coherente.
Exploración Cuántica:
Imagina que esta luz índigo se conecta con un vasto campo de energía cuántica, el chakra Tercer Ojo.
Visualiza cómo este campo de energía se extiende en todas direcciones, conectándote con todas las formas de vida a nivel cuántico.
Evocación del Quantum Sensorial:
Visualiza un símbolo o patrón que represente la configuración cuántica, uniendo los puntos de energía en tu tercer ojo.
Siente cómo este símbolo se alinea con la luz índigo, potenciando y equilibrando tu energía cuántica.
Sanación de la Herida de Intuición Apagada:
Enfoca tu atención en la herida de intuición apagada. Visualiza cómo la luz índigo envuelve esta herida, llenándola de amor y compasión.
Repite en tu mente: “Estoy transformando la intuición apagada en percepción clara y sabiduría.”
Siente cómo la energía cuántica trabaja para modular y transformar esta herida, convirtiendo la limitación en una fuente de fortaleza y poder personal.
Reflexión Cuántica:
Ahora se da un momento en el que un pensamiento se disuelve y antes de que entre el otro, hay un agujero muy pequeño. Y en ese agujero, hay algo que puedes atravesar para llegar a una posibilidad habitable.
Permanece en este estado de conexión durante unos minutos, permitiendo que cualquier mensaje o sensación emerja a nivel cuántico. Siéntete libre de anotar cualquier pensamiento o visión que surja durante esta meditación.
Cierre Cuántico:
Lentamente, comienza a traer tu atención de vuelta a tu cuerpo físico.
Toma tres respiraciones profundas nuevamente y, cuando estés listo, abre los ojos.

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