Vistas de página en total

jueves, enero 01, 2015

Oxímoron


Puedo  imaginar  a  San  Juan de la Cruz,
en  su  frío  aposento,  rayando  con  un  haz
de  luz  un  máximo  poético.

Granada  cielo  e  infierno.

A ese  culmen  inexorablemente  me  remito
que  por  su  determinación  te  retiene,
que  por  mi  voluntad   nos  atrapa.

Granada  infierno  y cielo.

Y  cantando,  una  copla  desgarrada
de  Federico, desaparezco...

"Empieza  el  llanto de la  guitarra.
 Se rompen  las copas de la madrugada.
 Empieza el llanto de la  guitarra.
 Es inútil  callarla... es imposible  callarla"

No hay comentarios: